Uno de los canales más importantes, de los muchos posibles en las reacciones entre núcleos pesados, a una energía de hasta unos 10 MeV por nucleón, es el que lleva a la formación de un núcleo compuesto. Una vez formado, dependiendo de la dinámica y naturaleza de la colisión, puede decaer por dos vías: por fisión en dos fragmentos de masa parecida o por evaporación de partículas ligeras (especialmente neutrones), además de la emisión de rayos gamma permaneciendo como tan núcleo compuesto de masa aproximada a la suma de los colisionantes. En este último caso (y en el anterior antes de que tenga lugar la fisión), prácticamente toda la energía de excitación de los nucleones y en energía de rotación del núcleo en conjunto. Las técnicas de aceleración y detección actuales permiten estudiar a éste en altos estados de excitación y de momento angular. Así puede observarse al núcleo a varios MeV de temperatura (la aleatoriedad de la distribución de energía de excitación y un número de nucleones del sistema compuesto suficientemente alto, permite introducir el término estadístico de temperatura nuclear) y hasta unos 60n unidades de momento angular. En términos generales, la rotación deforma el potencial nuclear. Por tanto, la espectroscopia de estados de alto espín proporciona información sobre el movimiento de los nucleones en el potencial deformado de un núcleo caliente y rotando. Consecuentemente, el estudio teórico del núcleo en esas condiciones exige el análisis de la influencia en sus propiedades de las tres magnitudes: temperatura, momento angular y deformación nucleares.
El objetivo del presente trabajo es desarrollar y aplicar diferentes aproximaciones teóricas al estudio de varios tipos de vibraciones nucleares en las condiciones de excitación, deformación y rotación antes mencionadas.